Namibia y el cine Iberoamericano

Como ya se ha hecho habitual cada año, y no por eso es menos esperado, comenzó la IV Semana de Cine  Iberoamericano en Namibia, organizado por las Embajadas, de la República Bolivariana de Venezuela, Brasil, Portugal y Cuba, en la Biblioteca Principal de la Universidad de Namibia (UNAM), durante los días del 12 al 16 de mayo de 2014.

La cónsul de Cuba en Namibia, Yailín García Carbonell, en su función de  Maestra de Ceremonia, dirigió unas palabras introductorias al auditorio presente.

Para dar paso a las palabras pronunciadas por el embajador de Cuba en Namibia, Carlos Manuel Rojas Lago, con las que dejaron  inaugurado el evento. Acto seguido se proyectó la película cubana, "Ciudad en Rojo". 

La misma contó con una  favorable acogida, por parte del heterogéneo público, que llenó el acogedor espacio del recinto universitario.

Un Cóctel de Bienvenida, brindado por los organizadores del evento,  sirvió de pretexto para compartir entre hermanos latinoamericanos, europeos y namibianos, presentes en la proyección de la película.

Fue un buen momento para estrechar relaciones, saludar a viejas amistades o reconocer a conocidos y conocidas, que suelen coincidir en este tipo de actividad cultural, distanciados, tal vez, por los habituales problemas laborales y las obligaciones de la vida diaria.

Descubrir, también, a una bella namibiana, que sirvió de portada a un artículo de nuestro Blog, “Asumir a África con otra mirada” y que fue divulgado por el periódico digital cubano, Cubadebate.

Para  asombro de esta  sencilla muchacha, era reconocida, por colegas cubanos, que insistieron en tomarse una instantánea con la simpática estudiante o simplemente,  intercambiar unas palabras.

La visita a la Universidad de Namibia, en especial su espaciosa y bien equipada biblioteca, nos recordó el proceso de cambio que ocurre en esta tierra y la necesidad de dejar a un lado los falsos estereotipos que se han cimentados, en muchas mentes, sobre la realidad africana. En este recinto de estudio se forman los futuros profesionales, que elevarán, la nación namibiana, a nuevos peldaños en el desarrollo y el bienestar de su pueblo.

Hecho el necesario paréntesis,  imposible de soslayar, en la divulgación  de la  realidad   de este país,  retomamos el hilo conductor para narrar las vivencias del  segundo día de  jornada.

La nueva oferta fue la película española “Una pistola en cada mano”, una interesante propuesta,  que, no sé por qué, me hizo recordar un impactante libro de la escritora Carson McCullers, “El corazón es un cazador solitario”, tal vez porque tiene punto de contacto con la obra, al menos,  en su intento por acercarse a los insondables sentimientos del alma humana, que por momentos se convierte en comedia, sobre  la soledad de los protagonistas, la necesidad de ser escuchado y comprendido, en medio de sus conflictos espirituales. El público salió complacido de la muestra del cine español.

El tercer día de la jornada de cine nos trajo una impactante película venezolana, ¨El Manzano Azul¨.

Cuando las luces del salón indicaban el fin de la proyección, un auditorio en silencio, con las emociones reflejadas en los rostros,  parecía no salir de su arrobamiento, antes dar riendas sueltas a los merecidos aplausos. 

Era tal expresión del público que estuve tentado en apretar el obturador de la cámara,  no recuerdo nunca haber visto un auditorio tan heterogéneo, sin distinción de género,  hacer visible sus emociones, tanto, que el embajador de Venezuela, Juan Carlos Barrios Hurtado, no pudo evitar decir una expresión, muy de su patio, “a quién no se le sale el guarapo”, que traducido al “cubano” sería como,  “el que no llore con este drama, no llora con nada”

Es la historia de un niño de la ciudad que se ve obligado a pasar las vacaciones con su abuelo que vive en una pequeña finca en el campo, carente de la tecnología moderna a que está acostumbrado el pequeño Diego.

Es, además,  una aventura de exploración dentro del el alma humana, ya al final de la vida del anciano, que tiene plantado  un manzano, cargada de simbolismo, y que extrañamente “decidió” ser azul.

Es algo más que  el relato de la soledad, es el reflejo de una época, con su carga de egoísmo, pero también dotada de los valores universales, manifestados en la verdadera solidaridad entre seres humanos sometidos a los avatares de la vida. 

Con la muestra fílmica de Portugal, “The Gilded  Cage”, se realizó la penúltima jornada del Festival de cine Iberoamericano, esta vez la propuesta es una comedia, que venía precedida de ganar el premio de la popularidad en los 26 Premios del cine Europeo y había conquistado la audiencia portuguesa, que la convirtió en el titulo más taquillero en los cines de su país hasta finales de noviembre del 2013.

La encargada de negocios de Portugal en Namibia, Helena Furtado de Paiva, hizo la presentación de la película que fue disfrutada por el público presente en la sala.

Las puertas del Festival tienen un cierre para recordar, su propuesta, “Los Dos hijos de Francisco” una conocida producción fílmica brasileña ganadora del favor del público en todos los lugares que ha sido  exhibida.

Narra la vida de Francisco, un hombre pobre y sencillo cuya máximo sueño es que sus dos hijos, Zezé Di Camargo y Luciano, lleguen a ser grandes músicos, para lo que realiza grandes esfuerzos, viendo su anhelo convertido en realidad.

Hizo la presentación de la película el encargado de negocios de la República Federativa de Brasil,  Fernando Figueira de Mello. Los resultados, los esperados, un éxito total del público presente en el auditorio, que sólo le queda esperar por una nueva jornada del cine Iberoamericano en el 2015.